
Cuando hacemos limpieza general, se da uno cuenta que la cantidad de cosas acaparadas durante un años o varios, según la periodicidad de cada hogar. En mi caso cada verano mas o menos. El caso es que, o compraba muebles estanterías para los dvds y libros que iban apareciendo por doquier, (pero esto tenia un insalvable inconveniente, no hay ya mas espacio en mis 73 metros cuadrados de hogar, dulce hogar) o me deshacía de ellos, de algunos claro está, recordé que ya he leído en la prensa local, en diversas ocasiones que nuestra Biblioteca Provincial aceptaban volúmenes para fondos, y luego repartirlos por nuestra geografía, allá donde hiciera mas falta. La solución me venia como un bocadillo para el hambre de Carpanta ¡genial!
Una vez hecha un primer descarte de libros y películas (originales) seguí con una segunda vuelta, total, que en dos bolsas de esas de reciclaje con asas que te venden en los supers con auto propaganda que tu encima le pagas, donde casi te caben dos hipopótamos bailando un vals metí mi donación de novelas ya releídas y poemários etc.
Mi casa y ese gran edificio las hicieron por separados, en distintas épocas y además distantes uno del otro, ¡mucho Allí pregunté, al día siguiente, ya que pasaba por la puerta,
-Si, por supuesto recogemos material, pero debe llevarlo arriba,
-¿Cómo? ¡Oh! ¿No hay un servicio de recogida a domicilio a la semana, a la quincena al mes?
. No, no hay que traerlo aquí.
-¿Y los que no puedan porque viven en la otra punta opuesta de la ciudad, y no tengan coche? Además de eso, la calle es peatonal, también puede suceder que esa persona sea mayor y no pueda con el peso, en fin, que encima que colabora altruista mente tiene que ahorradles a ustedes el trabajo.
-¡ah! Es voluntario.
-ya.
Esa misma noche el contenedor más cercano a mi calle, era uno de los cultos del contorno.
Una vez hecha un primer descarte de libros y películas (originales) seguí con una segunda vuelta, total, que en dos bolsas de esas de reciclaje con asas que te venden en los supers con auto propaganda que tu encima le pagas, donde casi te caben dos hipopótamos bailando un vals metí mi donación de novelas ya releídas y poemários etc.
Mi casa y ese gran edificio las hicieron por separados, en distintas épocas y además distantes uno del otro, ¡mucho Allí pregunté, al día siguiente, ya que pasaba por la puerta,
-Si, por supuesto recogemos material, pero debe llevarlo arriba,
-¿Cómo? ¡Oh! ¿No hay un servicio de recogida a domicilio a la semana, a la quincena al mes?
. No, no hay que traerlo aquí.
-¿Y los que no puedan porque viven en la otra punta opuesta de la ciudad, y no tengan coche? Además de eso, la calle es peatonal, también puede suceder que esa persona sea mayor y no pueda con el peso, en fin, que encima que colabora altruista mente tiene que ahorradles a ustedes el trabajo.
-¡ah! Es voluntario.
-ya.
Esa misma noche el contenedor más cercano a mi calle, era uno de los cultos del contorno.