27/5/10

¡Tiremos la cultura pues…!


Cuando hacemos limpieza general, se da uno cuenta que la cantidad de cosas acaparadas durante un años o varios, según la periodicidad de cada hogar. En mi caso cada verano mas o menos. El caso es que, o compraba muebles estanterías para los dvds y libros que iban apareciendo por doquier, (pero esto tenia un insalvable inconveniente, no hay ya mas espacio en mis 73 metros cuadrados de hogar, dulce hogar) o me deshacía de ellos, de algunos claro está, recordé que ya he leído en la prensa local, en diversas ocasiones que nuestra Biblioteca Provincial aceptaban volúmenes para fondos, y luego repartirlos por nuestra geografía, allá donde hiciera mas falta. La solución me venia como un bocadillo para el hambre de Carpanta ¡genial!
Una vez hecha un primer descarte de libros y películas (originales) seguí con una segunda vuelta, total, que en dos bolsas de esas de reciclaje con asas que te venden en los supers con auto propaganda que tu encima le pagas, donde casi te caben dos hipopótamos bailando un vals metí mi donación de novelas ya releídas y poemários etc.
Mi casa y ese gran edificio las hicieron por separados, en distintas épocas y además distantes uno del otro, ¡mucho Allí pregunté, al día siguiente, ya que pasaba por la puerta,
-Si, por supuesto recogemos material, pero debe llevarlo arriba,
-¿Cómo? ¡Oh! ¿No hay un servicio de recogida a domicilio a la semana, a la quincena al mes?
. No, no hay que traerlo aquí.
-¿Y los que no puedan porque viven en la otra punta opuesta de la ciudad, y no tengan coche? Además de eso, la calle es peatonal, también puede suceder que esa persona sea mayor y no pueda con el peso, en fin, que encima que colabora altruista mente tiene que ahorradles a ustedes el trabajo.
ah! Es voluntario.
-ya.
Esa misma noche el contenedor más cercano a mi calle, era uno de los cultos del contorno.

25/5/10

Acoso

Acoso
Esta palabra que ahora, más que nunca suena en los medios de comunicación, le llevará a pensar en la mujer, a lo que ellas sufren en el hogar, trabajo, etc., y aunque es cierto, que de todas las oportunidades de acosar a alguien bajo el poder, en cualquiera de sus formas, ésta es las mas denigrante, pero no es a este acoso, al que me refiero.
Seguramente usted, tenga un itinerario diario para ir al trabajo, en caso de tenerlo, por que esa es otra, y en cada uno de los tropociéntos semáforos de esa línea, se encuentra usted con un señor de color, ¡no diga negro, no se le ocurra!, eso tendría un barniz racista.
Ese señor, ya le conoce a usted desde años muchos meses, o años, porque se para usted es “su semáforo” dos o cuatro veces al día, de los cinco laborales de una semana, y sabe de sobra, que no le comprará clínex, da igual se pegará a la ventana, e insistirá, mascullará algo inteligible y mañana vuelta a empezar.
Si alguna vez tiene la posibilidad de ir de terrazas a un bar, para junto a su esposa e hijos tomar unas tapas o poder cenar, se le acercaran de uno en uno ( a mi hasta siete) para venderte DVD, baratijas, artesanías, gafas, etc., Te muestran su mercancía, por encima de tu plato de comensal, sin usted saber si le esta cayendo polvo en su comida, y se quedan unos eternos segundos incordiándole, tratan de causar lastima, ante la impasibilidad de los camareros, o del propietario del negocio. Que ya se por que, (sospecho) ahí en ese bar de esquina terraza hermosa, de toldo efectista, donde trataba de cenar hay un constante trajín de estos señores vendedores que no aparecen en los registros mercantiles, por arte espontáneo, se auto convierten en clientes y… ¡Clinc! Caja, de vez en cuando.
Podría seguir escribiendo sobre el acoso que sufrimos los contribuyentes, a través del teléfono cuando no te dejan darte de baja en la compañía telefónica una vez acabas de cumplir con tu compromiso de permanencia, de cómo un Sábado por la mañana, te llaman al portero para que le abra a unos tiostocacojones, que vienen a traerte un mensaje de La Biblia. O de esas operadoras que desde otros países donde explotan a los trabajadores te quieren vender lo que sea. Pero creo que ya con esto es mas que suficiente para nos veamos identificados tanto yo como a quien se le haya ocurrido leerme, (ojala)